No se decidió el partido hasta bien entrada la segunda parte, primero Lukaku y después Osman (0-2) dieron la victoria al Everton que fue superior al Aston Villa.
Dos nombres propios ocupaban las previas del partido que se iba a disputar en el Villa Park entre Aston Villa y Everton, por parte de los locales Benteke mientras que por parte de los visitantes el hombre del día era Lukaku, ambos belgas y ambos delanteros jóvenes que están eclipsando a toda la Premier League a base de goles.
El partido comenzó con poco ritmo al poco tiempo de juego el Everton ya se hizo dueño del balón aunque no consiguió jugarlo con fluidez, la posesión la tenían pero se veían incapaces de llegar a tres cuartos de campo y crear ocasiones. Mientras tanto el Aston Villa esperaba replegado atrás para hacer daño a la contra, sobretodo con su gran arma, Benteke que con su velocidad comenzó a crear problemas a la defensa contraría. En una de las primeras contras en las que el delantero belga pisó área fue derribado por un defensa contrario y el árbitro no dudo en señalar el punto de penalty, el mismo Benteke se encargó de lanzar la pena máxima, pero en esta ocasión no el penalty no tuvo un final feliz para los locales, gracias a la magnifica parada de Howard. A partir de ahí, con un Everton bloqueado, comenzaron a llegar las múltiples y claras ocasiones de los villanos, pero el verdadero protagonista del encuentro evito en dos ocasiones que los locales tomaran ventaja en el marcador. Primero parando un mano a mano de nuevo a Benteke y después con una gran salida ante Weimann cuando éste estaba en una posición perfecta para anotar el primer tanto de la tarde, pero no fue así gracias al estadounidense.
Las dos grandes acciones del portero despertaron al resto de los jugadores de 'Bob' y llegaron las ocasiones para estos, en concreto para uno de los protagonistas de la previa, Lukaku, primero se encontró con un balón que remató desde muy cerca y que Guzan logró rechazar de forma impresionante, minutos más tarde de nuevo el belga se inventaba una gran jugada pero llegó muy forzado al balón y no acertó a rematar. Eran los mejores minutos para los 'toffees' y de nuevo al fino del descanso, Barkley remataba un balón que tras golpear a un defensa acababa estrellándose en el larguero. Mirallas fue el último en tener una clara ocasión de gol, ante un Aston Villa que ya no era capaz de contener los ataques de un rival que estaba haciendo mucho más para adelantarse en el marcador. El español Luna se lesionaba unos minutos antes de que el arbitró mandará a los jugadores a los vestuarios.
Roberto Martínez movió ficha y sacó al campo a Osman por Barkley con la idea de asegurarse el control absoluto del encuentro, la jugada le salió bien y el Everton comenzó a controlar y rondar las inmediaciones del área de Guzan. Los de Liverpool controlaban ante un rival que carecía de armas para disputarle el control del encuentro y que siguió decidido a encerrarse y salir a la contra.
Corría el minuto 68 cuando por fin el partido cambió una gran jugada tejida por Osman, Baines y Pienaar terminó con un golpeo de primeras de Lukaku que al fin lograba batir a Guzan. El gol fue un palo importante para un Aston Villa que apenas lograba acercarse a Howard y que cuando lo hacia era con disparos lejanos que poco peligro entrañaban para el guardameta. A falta de diez minutos para el final 'Bob' respiro tranquilo, el partido estaba sentenciado, Barry se la dejaba a Osman en la frontal del área y con un tiro raso batía de nuevo a Guzan y finiquitaba el encuentro. Con el partido ya agonizando Naismith estuvo a punto de poner el tercero en el electrónico pero el esférico se fue a pocos centímetros de la portería.
La victoria deja a los de Roberto Martínez una semana más en la parte alta de la clasificación dando caza a los equipos punteros de la Premier, mientras que los villanos se ponen en serios problemas, dos puntos les separan del descenso.
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