Mal partido del Leicester City (0-0) ante un Copenhage que pese a su teórica inferioridad ha merecido más que el cuadro de Claudio Ranieri. A pesar de ello, el punto permite al Leicester seguir como líder del grupo y avanzar hacia el objetivo de la clasificación a octavos de final gracias a los 3 puntos de ventaja sobre el Oporto y los 5 sobre el mismo Copenhage.
El partido empezó con un Leicester City muy nervioso. Los chicos de Claudio Ranieri saltaban al césped de Copenhage dispuestos a ganar su cuarto partido en UEFA Champions League y cerrar la clasificación a octavos de final por la vía rápida, pero el transcurso del partido iba a demostrar que el objetivo inicial no iba a ser nada fácil de conseguir.
La primera parte fue casi un monólogo del Copenhage, con un Leicester irreconocible. Y no irreconocible en su manera de jugar, si no en su dominio defensivo y en la concentración que exige Claudio Ranieri a la hora de proteger a Kasper Schmeichel. Las principales ocasiones del equipo danés llegaron gracias a fallos de jugadores como Robert Huth o Wes Morgan, aunque los delanteros del Copenhage no lograban materializar ni poner en mayores dificultades al portero visitantes. Aún así el equipo danés dominaba el partido casi a su antojo, sobre todo en la primera media hora, tiempo en el que el Leicester fue incapaz de tirar a puerta. Fue una acción de Schlupp en el minuto 32 la que rompía esa estadística, pero con un disparo a la portería de Olsen realmente flojo y con poco peligro. Los últimos diez minutos fueron algo más fluidos, pero con pocas ideas. Claudio Ranieri situó a Ryan Mahrez como acompañante de Jamie Vardy y retocó el centro del campo, pero aún así no fue suficiente para poder llegar con verdadero peligro al portero de la escuadra danesa.
La segunda parte siguió por los mismos derroteros, el Leicester City apenas fue capaz de crear peligro y los daneses son los que sumaban las aproximaciones al área de Kasper Schmeichel. Era primero Fuchs quien evitaba el primer gol, sacando un disparo muy peligroso de Ankersen, uno de los jugadores más peligrosos de la escuadra local. Poco después Amartey con un disparo lejano y Drinkwater con una internada dentro del área intentaron poner el uy en la grada, pero ni con esas creaban peligro. El partido entraba en su recta final y el Copenhage ponía una marcha más para tratar de llevarse los tres puntos y apurar su opciones en el grupo. Pero primero era Fuchs quien aparecia en el minuto 69 para sacar el disparo de Santander justo sobre la linea de gol con Schmeichel ya batido, y en el minuto 89 era el propio portero del Leicester quien sacaba una mano para evitar el gol de Cornleius. Finalmente el empate a cero inicial era el resultado tras el pitido final, en un partido donde el Copenhage mereció mejor resultado.
Ficha técnica
Copenhagen: Olsen; Augustinsson, Johansson, Jørgensen, Ankersen; Falk (65' Toutouh), Delaney, Kvist, Verbič (82' Kusk); Cornelius, Santander
Leicester City: Schmeichel, Hernández, Huth, Morgan, Fuchs, Drinkwater, Amartey, Musa, Schlupp (71' Okazaki), Mahrez, Vardy
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