Por tercera vez en sus trayectorias, José Mourinho y Louis Van Gaal volvieron a verse las caras. Frente a frente, los que una vez fueron alumno y maestro. Como en los dos precedentes anteriores, el portugués logró sacar un resultado positivo ante el holandés
Esta pasada jornada en la Premier League se vieron las caras el Chelsea y el Manchester United. Un partido especial, por la importancia de los duelos recientes entre ambos conjuntos y también, por el duelo en los banquillos. Por tercera vez se enfrentaban José Mourinho y Louis Van Gaal. El primero, cumplía su segunda campaña en esta segunda etapa al frente del banquillo de los blues. El segundo, un recién llegado a la competición, vivía su primer curso dirigiendo a los red devils. Dos técnicos con un pasado común.
Ambos coincidieron en el cuerpo técnico del FC Barcelona, en la temporada 1997-1998. El holandés acababa de recalar en el conjunto azulgrana, mientras que el portugués continuaba en el equipo. Ya había formado parte del staff blaugrana en la temporada 1996-1997, actuando como asistente de un Bobby Robson que ya se valió de sus servicios tanto en el Sporting de Lisboa como en el Porto. La relación entre ambos duró tres temporadas, en las que el cuadro catalán logró dos Ligas, una Copa del Rey y una Supercopa de Europa.
Tras la temporada 1999-2000, en la que los azulgrana no consiguieron ningún título, los caminos de ambos siguieron cursos distintos. Van Gaal pasó a dirigir a la Selección holandesa, mientras que Mourinho inició su carrera como entrenador en solitario. Un camino por separado en el que ambos consiguieron títulos y logros. El holandés los consiguió al frente de AZ Alkmaar y Bayern Múnich, mientras que el portugués los logró con el Porto, Chelsea e Inter de Milán.
Los caminos de ambos técnicos se volvieron a cruzar en la temporada 2009-2010, en la final de la Champions League que se disputó en el Santiago Bernabéu entre el Inter y el Bayern. Diez años después de su separación, el maestro y el alumno pelearon por conquistar su segundo gran entorchado a nivel continental. Una final que cayó del lado de Mourinho, que coronó por tercera vez al Inter de Milán como campeón de la competición más prestigiosa del fútbol europeo.
Un primer duelo tras el cual, los dos volvieron a tomar nuevos destinos. El holandés asumió por segunda ocasión el mando de su selección, mientras que el portugués desembarcó en el Real Madrid, para reflotar a una entidad en horas bajas en el ámbito deportivo. No ha sido hasta esta campaña, cuando los dos han vuelto a coincidir en la misma competición como rivales.
El segundo cara a cara entre ambos se produjo en la novena jornada de competición, en Old Trafford. Un partido en el que Van Gaal consiguió rescatar un punto in extremis, gracias al gol de Van Persie en el minuto 94. Un tanto que puso el 1-1 en el marcador, contrarrestando el gol inicial de Didier Drogba que puso por delante a los blues.
Así las cosas, el balance en los duelos entre ambos seguía resultando favorable a un Mourinho que había ganado una vez a su maestro y había empatado en otra contra él. Van Gaal tenía la oportunidad de derrotar esta jornada por primera vez al portugués, algo que no se acabó produciendo. En Stamford Bridge, el Chelsea logró la victoria por 1-0, gracias a un gol de Eden Hazard. Y es que parece que el alumno le tiene cogida la medida a su maestro.
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