El West Ham afronta la nueva temporada con ilusiones renovadas. Tras una pasada campaña con baile en el banquillo y con una clasificación que no colmó todas las expectativas, quieren dar un vuelco y volver a codearse con los grandes.
Año nuevo, vida nueva, o como podría decirse en términos futbolísticos, temporada nueva, ilusiones renovadas. La temporada pasada empezó con Slaven Bilic en el banquillo, un entrenador que había logrado meter a los hammers en la UEFA Europa League hace dos años, pero en noviembre el técnico serbio fue destituido debido a su pésimo arranque de liga. David Moyes logró enderezar la situación y salvar holgadamente al equipo, pero sus resultados no han bastado para que la dirección les considerara satisfactorios.
El entrenador elegido para este nuevo proyecto es Manuel Pellegrini, un técnico con sobrada experiencia tanto fuera de Inglaterra (Universidad Católica de Chile, San Lorenzo y River Plate de Argentina, Villarreal, Málaga y Real Madrid en España) como dentro (Manchester City). Además su palmarés en las islas es considerable (1 Premier League y 2 EFL Cup). Un entrenador que sin duda puede ser calificado como ilusionante. La primera piedra está puesta.
Pero con un entrenador solo no basta, y los jugadores deben acompañarle. Para ello no han escatimado esfuerzos, y el West Ham ha decidido sacar a pasear la billetera. Felipe Anderson es el gran nombre de su mercado de fichajes, y no es para menos, ya que el fichaje del centrocampista brasileño ha costado más de 40 millones de euros. Con este jugador se llevan desborde, habilidad y llegada para la medular, no en vano en sus 4 últimas temporadas en la SS Lazio ha marcado 25 goles y ha repartido 32 asistencias. Un rendimiento que quiere repetir en Londres y que el cuadro hammer ha echado en falta durante la pasada temporada, ya que solo Marko Arnautovic fue capaz de marcar más de 8 tantos, y Mauro Lanzini y Aaron Creswell llegaron a las 7 asistencias. Imaginación y talento para el centro del campo.
A la portería llega Lukasz Fabianski (8 millones de euros) procedente del Swansea. A pesar de que el cuadro galés consumó su descenso a Championship en la penúltima jornada, el portero polaco fue uno de los jugadores más destacados del equipo. Su deber será luchar por la titularidad con Adrían San Miguel, que se alternó en la titularidad con un Joe Hart que no seguirá esta temporada.
En defensa hay tres fichajes nuevos. Desde el recien ascendido Fulham llega Ryan Fredericks (4 millones de euros), un lateral derecho de 25 años que fue incluido en el XI ideal de la Championship en la temporada pasada y que está llamado a ser el sustituto de Pablo Zabaleta. De Corinthians llega el paraguayo Fabián Balbuena (4 millones de euros) para reforzar el centro de la zaga, y desde el Toulouse aterriza un joven valor francés, Issa Diop (25 millones de euros). Con tan solo 21 años acumula más de 80 partidos en Ligue 1, siendo habitual en las categorías inferiores de la selección gala, con quien ganó el Europeo Sub’19 de 2016, siendo elegido en el XI ideal.
Además del ya mencionado fichaje de Felipe Anderson, el West Ham ha fichado talento puro para la medular. Para su mediocentro se ha hecho con los servicios de Jack Wilshere (llega libre a coste 0), todo un experto en la Premier League y uno de los hombres del Arsenal en la última década, con quien acumula 125 partidos, a los que hay que sumar otros 14 en su cesión al Bolton Wanderers (2009-10) y 27 en otro préstamo al AFC Bournemouth (2016-17). Y para sumar más talento en la creación del centro del campo también han fichado a Andriy Yarmolenko (20 millones de euros), un jugador que deslumbró en el Dimano de Kiev y que en su pasada temporada en el Borussia Dortmund no pudo corroborar todo lo que se esperaba de él. Muchas esperanzas puestas en el ucraniano, del que junto a Felipe Anderson y a los ya conocidos Manuel Lanzini o Michael Antonio se espera que den el do de pecho esta temporada.
Más de 100 millones de euros de inversión en lo que vamos de mercado de fichajes que sirven para reforzar posiciones clave en un West Ham que tuvo muchos fallos la pasada temporada. Una inversión que junto a poder evitar que se vayan jugadores como Marko Arnautovic, Aaron Creswell, Chicharito o Manuel Lanzini se antoja fundamental para que el equipo pueda volver a aspirar a algo más que a vivir en la zona templada de la clasificación.
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