El Swansea ha ido a buscar pareja de baile a España y se ha encontrado solo (0-3). La expulsión de Rami en el minuto 9 ha sido fundamental para el devenir del encuentro
El partido comenzó con un Valencia decidido a llevarse el partido, manejando el balón y llegando de forma tímida al área rival. Pero en el minuto 9 una jugada de Rami, supuso que el Valencia se quedara con 10 jugadores. Rami agarro a Bony, delantero del Swansea, cuando se iba solo hacia la portería de Guaita. El árbitro no lo dudo y le enseño la tarjeta roja. A partir de ese momento, el cambio dio un giro de 180 grados. Los galeses se vinieron arriba y se hicieron dueños y señores del partido. El baile a partir de ahí se animo y 6 minutos más tarde llego el primer gol para los de Laudrup. Bony fue el protagonista de este primer tanto que después de una triangulación acabo con un disparo que supero a portero "che".
El primer tiempo fue un cumulo de ocasiones de los galeses pero el resultado no fue más abultado gracias a la falta de acierto de los delanteros de Laudrup.
La segunda parte comenzó con la misma tónica y en el minuto 57 un gran pase de Pozuelo dejo solo a Michu ante Guaita que el jugador asturiano no desaprovecho. El segundo tanto subió al marcador y el partido ya estaba listo para sentencia. Pero antes de que llegase el pitido final llego el gol de la jornada, De Guzmán tiro una falta desde más de 30 metros que se introdujo por la escuadra de Guaita. Este gol redondeo el resultado y fue la guinda perfecta para el pitido final. Los de Laudrup supieron dominar y sobreponerse a la inferioridad del equipo español.
Resultado justo y merecedor de los galeses ante una defensa débil con falta de organización.
El Swansea dio un recital de baile, donde fue el único protagonista y merecedor de los tres puntos finales.
Deja una respuesta