Buen partido (1-4) de los hombres de Pep Guardiola ante un Brighton que nunca fue rival para la apisonadora skyblue. Los de Manchester comenzaron perdiendo por culpa de un tanto de Glenn Murray, que fue inmediatamente neutralizado por un gol de Agüero. Poco después marcaría Laporte y con los goles de Mahrez y Gündogan en la segunda mitad, el City volvía a levantar el trofeo de campeón de manera consecutiva
Hoy era el día. El todo o nada. La tarde de los transistores, de los nervios, de la multipantalla. Hoy los aficionados de la Premier League tenían que estar pendientes de Anfield y del Amex. Solo uno, Manchester City o Liverpool, podía salir campeón. Tras una campaña brutal de los dos equipos, solamente un punto les separaba en la carrera. El City visitaba al Brighton, que ya tenía los deberes hechos y que estaba más pendiente de darle una despedida a la altura a su capitán, Bruno Saltor, que de ganar el partido. Y eso que la cosa no empezó mal para los de Chris Hughton, ya que en el minuto 27, un buen corner de Gross lo remataba el incombustible Glenn Murray al primer palo para hacer su gol número 14 de la temporada y meter el miedo en el cuerpo de los skyblues. ¿Por qué? Porque paralelamente, Sadio Mané adelantaba al Liverpool frente a los Wolves y la Premier apuntaba a quedarse en Merseyside. Pero poco duró la alegría en casa del rojo, porque nada más sacar de centro, el Kun Agüero marcaba y volvía a poner las tablas en el marcador, tras una gran asistencia de tacón de David Silva. El argentino, con su olfato de gol habitual, detectó el hueco por debajo de las piernas de Ryan. Pum, al fondo de la red.
El City estaba cómodo. Quizás el resultado no le favorecía, pero no se volvieron locos. Sabían que iba a llegar, que el Brighton no podía con ellos. Toque, toque, toque...posesiones interminables made in Guardiola que desesperaron a las gaviotas, que corrían tras el esférico como podían. Y como el estratega que es, Guardiola lo vio claro. El Brighton estaba muy cerrado y a pesar de que el City llegaba con facilidad al arco de Ryan, no terminaban de sacar lo esperado. Poco a poco fue abriendo las bandas, desnudando la defensa rival a base de pases entre líneas, que dinamitaron por completo la oposición local. Y tanto fue el cántaro a la fuente que al final se rompió. Córner de Mahrez y testarazo de Laporte para desatar la locura en el fondo visitante y desplegar la tristeza en Anfield. Esta Premier no se les iba a escapar.
La segunda parte tuvo muy poca historia. Con los deberes hechos, el City se dedicó a amasar la pelota, movíendola de un lado al otro con suma facilidad. El Brighton, que ya no tenía ganas de luchar, se limitó a cubrirse como pudo ante las constantes embestidas de los citizens, que encontraron el gol de la tranquildad gracias a un gran disparo desde fuera del área de Mahrez. El argelino recortó en la frontal, dejó sentado a Dunk y disparó con efecto, llegando Ryan a tocarla pero no a despejarla. El broche de oro lo puso Gündogan, con un lanzamiento de falta sublime, para cerrar el partido ya si de manera definitiva. El Manchester City revalida su título tras la temporada más disputada de los últimos tiempos. Hasta los 98 puntos se fueron los hombres de Guardiola frente a los 97 del Liverpool. Los de Klopp solamente perdieron un encuentro este año: frente al Manchester City. Al final, el ser campeón se definió por la fotofinish. Disfrutadlo, skyblues. El esfuerzo ha merecido la pena.
FICHA TÉCNICA
Brighton: Ryan, Bruno (Montoya, min 84), Duffy, Dunk, Bernardo, Knockaert, Kayal, Bissouma, Jahanbakhsh (Locadia, min 68), Gross, Murray (Andone, min 68).
Manchester City: Ederson, Walker (Danilo, min 88) Kompany (Otamendi, min 86), Laporte, Zinchenko, Gundogan, David Silva (De Bruyne, min 78), Bernardo Silva, Mahrez, Agüero, Sterling.
Goles: Murray (min 27) / Agüero (min 28), Laporte (min 38), Mahrez (min 63), Gündogan (min 72).
Estadio: Amex Stadium.
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