El Tottenham remonta un 3-0 contra el West Brom (3-3) con mucha insistencia pero sin brillo. Eriksen anotó el 3-3 en el minuto 94. El WBA no supo gestionar su ventaja y Pepe Mel sigue sin conocer la victoria en casa
Nada de lo acontecido al final del partido podían imaginarse los jugadores, miembros del equipo técnico y aficionados del West Bromwich Albion cuando Sessegnon ponía el 3-0 en el minuto 31 de encuentro. El Tottenham fue un flan y su defensa no dejó de hacerle concesiones a un rival bien plantado que supo aprovechar las oportunidades de que dispuso.
Vydra anotó en el segundo 28 y Brunt establecía un cómodo y tempranero 2-0 con una gran ejecución de una volea cuando un rechace le cayó del cielo estando sólo en el área. Todos los esquemas del Tottenham se rompieron y los de Mel empezaron a jugar muy fácil, aprovechando los espacios de su rival.
Nada les salía bien a los de Sherwood. Ni siquiera un liviano pero justo penalti a Rose en el que el lateral salió despedido más de la cuenta fue capaz de aprovechar Adebayor. Foster adivinó un suave y predecible disparo del togolés y pusó la guinda al peor inicio posible de un partido de fútbol.
No arrancaron los visitantes hasta el antes mencionado 3-0 de Sessegnon. El rápido delantero aprovechó un balón en largo mal prolongado por Kaboul para ganar a Chiriches en carrera y batir con facilidad a Lloris.
Necesitaron 3 goles en contra los Spurs para poder reaccionar, pero mejor tarde que nunca. Sólo tres minutos después lograba añadir el primer granito de arena para una posible remontada que se vería culminada en el descuento. Lennon, en una de sus jugadas clásicas, llegó hasta la línea de fondo y puso un centro raso que Olsson, sin querer, desvío en una parábola imposible de parar para Foster.
El inglés tuvo que emplearse para que su equipo no viera desperdiciada su ventaja demasiado pronto haciendo una doble parada dentro del área. Desde ese momento hasta el pitido final del encuentro el partido se convirtió en un monólogo de los de Sherwood, donde predominó más la insistencia que el tino y la brillantez.
Se echó para atrás el WBA y renunció completamente al ataque; incluso a las tan peligrosas cabalgadas de Sessegnon porque Mel decidió sentarlo y dar una consistencia con Yacob en el campo que sólo quedaría en el papel.
Volcado al ataque, Kane vio recompensado su buen trabajo durante todo el choque anotando un gol de cabeza en otra jugada clásica de Lennon por la banda. El joven delantero recibió su premio y su equipo un empujón más para llegar hasta la remontada.
En el 94, cuando el minutero afrontaba sus últimos tic-tacs y los aficionados devoraban sus uñas, Eriksen tiró de templanza dentro del área y, controlando un balón rechazado, envió un potente chut a la escuadra. El trabajo del WBA en la primera parte se veía truncado por un planteamiento erróneo y los Spurs encontraban el merecimiento de unos 96 minutos luchando por todo, aunque mostrando también sus errores. 96, por cierto, un número muy presente en la fecha de hoy y que todos recordamos siempre.
Ficha técnica:
Goles: 1-0 Vydra (min. 1); 2-0 Brunt (min. 4); 3-0 Sessegnon (min. 31); 3-1 Olsson (p.p.) (min. 34); 3-2 Kane (min. 72); 3-3 Eriksen (min. 94).
West Bromwich Albion: Foster; Reid, McAuley, Olsson (Dawson 77'), Ridgewell; Amalfitano, Mulumbu, Brunt, Dorrans; Sessegnon (Yacob 59') y Vydra (Berahino 73').
Tottenham Hotspur: Lloris; Naughton, Chiriches (Fryers 46'), Kaboul, Rose (Townsend 85'); Lennon, Chadli (Sigurdsson 78'), Paulinho, Eriksen; Adebayor y Kane.
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