Tras una temporada 2013/2014 brillante el Burnley logró gracias a su segundo puesto en la Npower Championship el ascenso a la Premier League. Tras varios años de ausencia regresaba a la máxima competición del fútbol inglés. Tras nueve jornadas, su nueva aventura no pinta bien. Aún no han conseguido la victoria y presenta unos números poco esperanzadores. Cuatro empates y cinco derrotas con tan solo cinco goles a favor y 16 en contra.
El equipo se basa en la base del equipo que le llevo al éxito el año pasado con algunos retoques, lo que parece no ser suficiente para competir en la Premier League. En la portería Heaton es indiscutible a pesar de ser uno de los equipos más goleados. El portero cuenta con la total confianza de Sean Dyche. En defensa continua con la base de la temporada pasada formada por Trippier, Shackell, Duff y Mee a pesar de contar con grandes fichajes como Reid, Chalobah o Keane. La portería y la defensa no han sufrido modificación respecto a la temporada pasada y quizás se debería contar más con los nuevos fichajes que pueden aportar experiencia y calidad.
De medio campo en adelante los puestos no están definidos y solo Jones, Arfield y Jutkiewicz son titulares habituales. La falta de gol puede deberse sin duda a la ausencia de la pareja Ings-Vokes que por sendas lesiones no han podido apenas ayudar al equipo. Hombres como Taylor o Kightly deberían dar un paso al frente para poner su experiencia al servicio de un equipo que no está acostumbrado a competir en la máxima categoría.
La falta de experiencia, las lesiones de sus goleadores, una plantilla mal diseñada,….. Pueden ser muchas las causas de la mala situación del Burnley pero tendrán que intentar reponerse cuento antes porque un mal inicio te puede condenar para el resto de la temporada.
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