Victoria del Manchester City (2-0) ante un West Ham que jugó un horrible partido. Vuelve a la senda de la victoria el equipo de Pellegrini tras una mala racha
Seis derrotas en los últimos ocho partidos oficiales era la racha con la que se presentaba un domingo más el Manchester City ante su afición. Una pobre imagen que mantiene a su técnico cuestionado y al equipo peleando por entrar en Liga de Campeones.
Buen inicio del conjunto 'citizen' que dispuso de varias ocasiones, no peligrosas, ante un débil West Ham cuyo fútbol quedó en la primera mitad de la temporada. Una jugada por banda derecha con centro al área por parte de Jesús Navas lo remataba Collins hacia su propia portería. Gol del City. Tras este gol, el ritmo de juego disminuyó considerablemente. Un robo de balón de Touré en medio campo lanzaba al equipo a la contra. Agüero conducía por el medio, abría el balón a banda derecha para que Navas centrara y el propio delantero argentino marcase el segundo. El West Ham tan sólo dispuso de una ocasión clara en el primer tiempo.
El segundo tiempo empeoró el encuentro. El fútbol se apagó y ningún equipo supo mantener el ritmo alto y materializar las llegadas al área rival. Lo más destacable, un duro codazo sufrido por David Silva que necesitó ser atendido durante un buen rato sobre el terreno de juego. El canario se retiró en camilla con collarín y oxígeno.
El City suma una victoria que le deja a un solo punto del United en la lucha por la tercera posición.
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