El Manchester United se impuso (3-0) al Olympiacos en un partido muy serio y consigue el billete para los cuartos de final de la Champions League. Van Persie, que terminó lesionado, fue determinante con sus tres goles.
Tras el 2-0 de la ida el partido de Old Trafford se convirtió en una final. Una eliminación tan prematura ante un equipo aparentemente inferior era inadmisible. Old Trafford se vistió de gala y se vivió el ambiente de las grandes noches.
Comenzó el partido el United un poco tenso. No conseguía encerrar al Olympiacos. El equipo de Michel no sufría. Con el paso de los minutos, y gracias al apoyo incondicional del público, el United comenzó a acosar a los griegos. Avisó Rooney con un remate de cabeza al palo y cinco minutos Manolas cometió penalti sobre Van Persie. El holandés fue el encargado de transformarlo y no perdonó, aunque Roberto estuvo cerca de pararlo.
A raíz del gol el United se animó y estuvo cerca de igualar la eliminatoria con un remate de cabeza de Evra. Pero cinco minutos antes del descanso el Olympiacos dispuso de una doble ocasión que podía haber cambiado el desenlace del encuentro. Hernán Pérez y el “Chori” Domínguez se encontraron con un gran De Gea que con dos paradas espectaculares salvo la eliminatoria. Sin tiempo para recuperarse el Olympiacos recibió un golpe letal. Pase largo para Rooney que la controla y la pone para que Van Persie anote el segundo. La locura estalló en Old Trafford.
Los diablos rojos salieron en la segunda parte con mayor tranquilidad. Habían igualado la eliminatoria. Pero poco pareció importarle a Van Persie. El holandés y Rooney engañaron a Roberto en un lanzamiento de falta y Van Persie anotó por el palo del español. El Olympiacos se hundió. El United jugó con la cabeza fría y se dedicó a controlar el partido ante un impotente Olympiacos. Michel intentó cambiar la dinámica con los cambios pero de poco sirvió. El United venció. Moyes se salvó.
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