Victoria del Newcastle en St. James Park (2-0). Un partido muy fe, sobretodo en la primera mitad donde ni siquiera hubo ocasiones, el desenlace se produjo en la segunda parte con un protagonista, Wijnaldum. Doblete del holandés, en el primer tanto Skrtel desvió el remate y éste acabó en la red, el segundo tanto fue tras una contra en los últimos minutos de encuentro
Día de mucha necesidad para los hombres de McClaren, demasiado tiempo jugueteando con el descenso. Frente a ello un Liverpool en alza que desde que Klopp tomó el mando ha ido hacía arriba y ya es un equipo más a tener en cuenta en la lucha por el título. Dos equipos con trayectorias muy diferentes.
El partido comenzó lento, ambos conjuntos comenzaron una fuerte lucha por hacerse con el control del partido. Se esperaba que el partido arrancara, que llegaran las ocasiones, pero los jugadores no estaban por la labor. Cada vez que el Liverpool tenía el balón lograba mostrar las debilidades del Newcastle que acabab metiendose en su campo con muchas dificultades para salir. Con el paso de los minutos los 'reds' fueron a menos dando vida a frágil Newcastle que comenzó a creer en sus posibilidades.
Es díficil destacar algo en un primer tiempo tan malo como el que protagonizaron ambos conjuntos, las urracas tenían claro que tenían que esperar su momento y que fueran los chicos de Klopp los que tomaran la iniciativa, pero nunca llegó a ocurrir lo cual facilitó bastante la labor de los locales.
Tras la reanudación, se esperaba ver otro partido, pero el comienzo fue el mismo que en la primera mitad, no llegaban las ocasiones y los nervios comenzaban a aflorar. Klopp movió ficha primero, saltaron al campo Sturridge y Lallana en lugar de un desaparecido Firmino y un desaprovechado Benteke. Los dos ingleses dieron otra prespectiva y comenzó por fin a fluir el juego del Liverpool. Fue entonces cuando el Newcastle golpeó muy duro a sus rivales, en una jugada por la derecha el balón acabó en el área donde Wijnaldum logró encontrar posición de disparo, lo probó, con tal fortuna que el balón tocó en Skrtel que desvio los suficiente para despistar a Mignolet. Se adelantaban los locales.
Los 'reds' pusieron una marcha más, aunque no llegaba el juego que se esperaba, sí llegaban las ocasiones, dos seguidas las tuvo Sturridge en sus botas pero no estuvo acertado y sus disparon se fueron desviados. Lo que sí puedo cambiar el encuentro fue el magnifico gol de Alberto Moreno pero el árbitro lo anuló por fuera de juego. La repetición confirmo que el español estaba en posición correcta, ese hubiera significado el gol del empate a falta de diez minutos.
Ya en el tiempo de descuento el Newcastle finiquitó el partido, de nuevo el protagonista fue Wijnaldum, en una contra Sissoko se sacaba de la chistera un magnifico pase para que el delantero holandés se plantara ante Mignolet y le batiera sutilmente sentenciando el partido y hundiendo a un Liverpool que en ningún momento mereció más de lo que se llevó.
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