Tercer partido de Inglaterra en su camino hacia el Mundial 2018. Tras las victorias frente a Eslovaquia y frente a Malta, el equipo de Gareth Southgate se enfrenta a Eslovenia con el liderato del grupo en juego.
Después de vencer 2-0 a la débil Malta en un partido en el que el marcador pudo ser mucho más amplio pero que contó con la espectacular actuación del portero maltés (aunque nacido en Londres muy cerca del estadio de Wembley), los chicos de Gareth Southgate viajan a Ljubljana para enfrentarse a la selección de Eslovenia el martes a las 20:45 horas. El seleccionador inglés no podrá contar con Ryan Bertrand, ya que se lesionó en el minuto 18 del partido frente a Malta y ha causado baja en la concentración. En su sustitución entra Kieran Gibbs, que vuelve a una convocatoria de los Three Lions un año después de su última participación. Además de la baja de Bertrand, Gareth Southgate también cuenta con las bajas de Raheem Sterling, Glen Johnson y Phil Jagielka con respecto a la convocatoria inicial. Pocas novedades introducirá el técnico inglés con respecto al once inicial de Wembley, quedando a la espera del sustituto de Bertrand y los cambios que pueda hacer sobre todo en la parte ofensiva, con la posible inclusión de Jamie Vardy o de Marcus Rashford.
Eslovenia llega a esta tercera jornada con cuatro puntos y amenazando el liderato del grupo que ostenta Inglaterra. Su empate a dos en la primera jornada frente a Lituania y la victoria por 1-0 frente a Eslovaquia este fin de semana deja a la selección entrenada por Srecko Katanec a tiro de piedra de los ingleses. Los centroeuropeos tienen un buen bloque en el que sobresalen dos nombres propios. El primero es Jan Oblak, portero del Atlético de Madrid, portero menos goleado de la liga española la pasada temporada y considerado uno de los mejores guardametas del mundo. Aunque en su selección no está igual de arropado que en su club, sigue siendo un seguro de vida para su equipo y una de las estrellas del equipo. El segundo nombre es Josip Ilicic, jugador de la AFC Fiorentina y uno de los nombres propios del Calcio la temporada pasada, donde marcó 13 goles y contribuyó de forma decisiva a clasificar a su equipo para competiciones europeas. A pesar de jugar en el centro del campo, el jugador tiene una gran facilidad para ver porteria y una gran habilidad para volver locos a sus defensores, algo que frente a una defensa como la inglesa puede ser un peligro. Además de estos dos nombres propios, la selección tiene muchos jugadores experimentados que juegan en grandes ligas como la española (Khrin en el Granada, Jokic en el Villarreal), la italiana (Kurtic en el Atalanta) o en la alemana (Kampl en el Bayer Leverkusen o Bezjak en el Darmstadt). En definitiva, la victoria inglesa va a ser muy difícil en un campo que aprieta mucho al rival.
Ambas selecciones se han enfrentado cuatro veces a lo largo de la historia, y las cuatro veces la victoria ha caído del lado inglés. La primera fue en 2009 en un partido amistoso con un resultado de 2-1 (Lampard y Defoe para los ingleses, Ljubijankic para los eslovenos) y la segunda fue en 2010 en la última jornada del Grupo C del Mundial de Sudafrica. Victoria para los Three Lions por 1-0 con gol de Defoe, tres puntos que significaron el pase a octavos de final de Inglaterra y la eliminación de Eslovenia. Los dos últimos choques fueron en la fase de clasificación para la Eurocopa 2016, con victoria por 3-1 en Wembley (gol de Rooney y doblete de Welbeck para neutralizar el gol de Henderson en propia puerta) y 2-3 en el mismo escenario del partido de mañana (doblete de Wilshere y gol de Rooney).
Partido muy importante para el devenir del grupo, ya que aunque queden muchos partidos por disputarse, con la victoria distanciaría en cinco puntos a los eslovenos (que junto a Escocia son sus máximos rivales) y conservaría el liderato del grupo (solo el primer clasificado tiene plaza directa para Rusia 2018, el segundo iría a la repesca).
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