El Manchester United asaltó el Liberty Stadium (0-4) goleando a un inoperante Swansea en cuatro minutos locos. Bailly abrió la lata al borde del descanso y a falta de 10' para el final, llegó la sentencia por partida triple de Lukaku, Pogba y Martial en un periodo de cuatro minutos. Victoria firme de los 'red devils', que no concedieron opciones a los galeses.
Es sabido por todos que Mourinho es de segundas temporadas. Como si estuviera alimentando un conejo en su chistera durante un tiempo y decidiera sacarlo a partir de 365 días. Pese al abultado resultado, no brilló el United en Gales, pero es que su rival no le exigió tal tarea. La recopilación de nombres estelares que disponía sobre el verde amedrantó de por sí a un Swansea con la mordiente de un osito de peluche y aparentemente centrado en aprender a vivir sin Gilfy Sigurdsson. El United se presentó como una brisilla húmeda de verano y terminó azotando el Liberty como un huracán. Licencia para sacar pecho los primeros días de cole concedida.
Para una primera mitad que exhibió pocas lindezas, hubo un par de coqueteos esférico-poste que anotar en el parte. Ayew pasados los dos minutos se topó con el larguero en un centro chut que sólo él sabe si disparó o centró y Phil Jones hizo lo propio en un remate con el hombro minutos después. El Swansea se dedicó a esperar, asumiendo su condición de inferior aunque el United no sacara aún el rodillo de su presentación en Oldtrafford la semana anterior. Como ya hemos dicho, tampoco le hacía falta. Lo de los últimos 10 minutos ya es otra historia.
La circulación de balón horizontal del equipo de José Mourinho era previsible y apenas desgastaba a unos 'cisnes' que aguardaban alguna ocurrencia de su joven incorporación Tammy Abraham, tapado a la perfección por la zaga visitante. El United no inquietaba por ocasiones, pero su dominio territorial acrecentaba. Como un comecocos acechando a Mr. Pac Man en un rincón sin salida. Bailly ejerció de Blinky, líder de los fantasmas, y castigó al borde del descanso la racanería de los de Paul Clement recogiendo en la línea de gol un rechace que dejaron dividido tanto Fabianski como el larguero, protagonista este último por encima de cualquier futbolista.
El United se dejó llevar por la inercia de lo que sucedió en el primer acto y se echó a la bartola. Algo bastante grosero con una ventaja tan corta, aunque el Swansea seguía sin encontrarle las cosquillas a los de Manchester. Paul Clement optó por la profundidad de Routledge y Narsingh, traspasado del PSV Eindhoven. El experimento continuaba sin dar resultado. El reloj alcanzaba el minuto 80 y con él se instaló un torbellino de camisetas rojas. Lukaku convirtió el segundo al dejarle sin marca Mkhitaryan, Pogba picó con clase en el tercero aprovechando una nueva asistencia del armenio y Martial, que se sumó al festín minutos antes, puso la guinda. Tres tantos en apenas cuatro minutos. El que se fuera a por un sandwich a la nevera se perdió el recital.
La goleada quizás sea engañosa, pero ser letal cuando hay que serlo tiene recompensa. Buena nota de ello tomarán los Chelsea, Arsenal, sus vecinos de Manchester… Mourinho y los suyos avisan que está temporada no van a soltar el cuchillo de los dientes.
Ficha técnica:
Swansea: Fabianski; Naughton, Fernández, Bartley (Routledge 67'), Mawson, Olsson; Roque Mesa (Narsingh 67'), Fer, Carroll, Ayew y Abraham.
Manchester United: De Gea; Valencia, Bailly, Jones, Blind; Matic, Pogba, Mata (Fellaini 74'); Mkhitaryan, Rasford (Martial 74') y Lukaku.
Goles: 0-1 min.44 Bailly; 0-2 min.80 Lukaku; 0-3 min.81 Pogba; 0-4 min.84 Martial.
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