Tras un fin de 2015 desastroso, el Chelsea consiguió remontar el vuelo aunque no fue suficiente para que los blues volviesen a Europa. Tras la salida de Mourinho, Hiddink tomó las riendas de un equipo destrozado anímicamente, con la afición en contra de pesos pesados y con mucho por hacer. Tras dejar al equipo décimo en la tabla tomó los mandos Antonio Conte, que tiene a su equipo primero y jugando un fútbol intenso y muy eficaz
Mejor XI: Courtois; Azpilicueta-David Luiz-Cahill; Moses-Matic-Kanté-Alonso; Pedro-Diego Costa-Hazard
Jugador del año: Es difícil acotar a dos jugadores dentro del Chelsea, ya que esta temporada funciona como un reloj. Pero si hubiese que elegir, sin duda serían N’Golo Kanté y Diego Costa. El primero ha devuelto la intensidad, vitalidad y garra que tenía el centro del campo blue cuando lo ocupaban jugadores como Essien o Makelelé. El parisino es puro nervio y corta balones con tanta facilidad que asombra a propios y extraños. Nunca parece cansado y siempre está dispuesto luchar por el equipo, sea el minuto que sea. Por otra parte el hispano-brasileño está en un estado de forma brutal. En este tramo de temporada ya lleva más goles que la temporada pasada entera (13 frente a 12) y casi las mismas asistencias (5 frente a 7). El de Largarto se le ve más calmado, no es el jugador tan agresivo que veíamos al principio. Ahora está más tranquilo. Y también es mucho más letal.
Entrenador: Antonio Conte. El exseleccionador italiano no ha dejado indiferente a nadie. Tras dos derrotas consecutivas frente a Liverpool y Arsenal en el mes de septiembre, parecía que su carrera de azul terminaría antes de lo esperado. Pero algo cambió en ese 3-0 en el Emirates. En los últimos minutos el equipo jugó con su esquema más carácterístico, el 3-5-2. Nada fue igual desde entonces. 11 victorias consecutivas le dieron alas y crédito al técnico, elegido dos meses consecutivos como manager del mes. Conte ha asimilado la filosofía blue y ha sabido transmitírsela a los suyos. El objetivo es ganar la Premier y volver a Europa. Nada más.
Momento: El 4-0 frente al Manchester United. El partido fue un mero trámite para los blues, que arrasaron a los red devils desde el primer minuto del partido. Pero el resultado fue más allá. El Chelsea del presente y futuro se enfrentó al mejor entrenador de la historia de los londinenses, derrotándolo con contundencia. Jose Mourinho siempre será recordado como el entrenador que hizo grande al Chelsea, no cabe ninguna duda.
Partido: 1-3 frente al Manchester City. La prueba de fuego para Antonio Conte y su invicto Chelsea tomó lugar en el Etihad frente al renqueante City de Pep Guardiola. El todo a nada por el liderato cayó de parte azul, con un partido sublime en lo táctico y con Eden Hazard y Diego Costa como protagonistas.
Decepción: La segunda vuelta de la temporada 15/16. Creo que todos los aficionados del Chelsea coinciden en que la temporada pasada fue la más decepcionante de los últimos años. Habría tantos momentos malos que destacar que podríamos llenar un libro.
Héroe: Eden Hazard. Su temporada pasada fue horrorosa, para qué engañarnos. Pero si el Chelsea ha de quedarse con un momento especial, con un momento más dulce que ágrio en una temporada pésima, sin duda tiene de protagonista a Eden Hazard. Cuando el Tottenham tocaba la Premier con la yema de los dedos, con 1-2 a su favor, apareció Eden. Su golazo en el 83 empató el partido y destrozó los sueños de los spurs.
Villano: Zlatan Ibrahimovic. El delantero sueco fue una pesadilla para los blues en los octavos de final de Champions League. Marcó dos goles que borraron de un plumazo las esperanzas del equipo de Hiddink.
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